Seis meses es el tiempo promedio de recolocación de un ejecutivo en el Perú. Esto lo estimamos en base a nuestros contactos con ejecutivos, así como la información que recibimos de las principales empresas de outplacement que operan en el Perú y otros países de la región latinoamericana. Nota que este tiempo implica una labor a tiempo completo en la búsqueda de trabajo.
Hay varios factores que influyen en el hecho de que algunos se recoloquen antes de este tiempo promedio. Algunos de estos factores, como la coyuntura económica del país, no dependen del candidato. Otros sí dependen directamente de su gestión en su búsqueda laboral. Este artículo provee consejos para aumentar la efectividad de los candidatos en búsqueda de empleos a través de: i) la generación de un plan de acción enfocado y ii) el desarrollo de las habilidades de negociación y ventas de los candidatos.
Generemos una estrategia y un plan de acción
En AB INAC estimamos que en el Perú:
- El 40% de las búsquedas a niveles gerenciales se lleva a cabo siguiendo un proceso estructurado y formal que comprende una convocatoria masiva de candidatos, un proceso de evaluación estándar, la preselección de una terna finalista, etc. Estos procesos gozan de esfuerzos proactivos para encontrar a candidatos que encajen en el perfil deseado al 100%. La empresa contratante tiene una necesidad específica que cubrir e invierte horas-hombre y dinero en encontrar a alguien con un perfil específico. Sólo se conformarán con una persona que se ajuste cuando menos al 90% del perfil deseado.
- El 60% restante son búsquedas que se cierran con menos de tres candidatos en el proceso. Muchas de éstas con un candidato único. No siguen un proceso formal y no hay una convocatoria masiva. Muchas de estas posiciones no existen hasta que el candidato se presenta y sugiere su inserción en el puesto. Otras son puestos que se declaran vacantes al conocer al candidato a contratarse.
Dada la naturaleza de la información anterior, nos es imposible obtener la data exacta. Lo cierto es que estos estimados sí nos permiten generar una estrategia y un plan de acción basado en estos dos grupos.
1. Estrategia y plan para posiciones con procesos estructurados:
La estrategia del francotirador. Dado que estamos hablando de procesos de búsqueda estructurados (ya sean manejados por empresas de executive search o por el departamento de RRHH de la empresa cliente), te conviene aplicar a aquellas oportunidades en las que piensas que encajas en el perfil en cuanto menos un 90%. Esto no es la clase del proceso que se cierra hablando únicamente de competencias transferibles, tu alta capacidad de aprendizaje o tu motivación por el puesto. Estos procesos se cierran demostrando que tienes la experiencia específica para el puesto porque ya lo has hecho antes.
Aplicar a posiciones en las que no encajas cuando menos al 90% es un trabajo ocioso, ya que muy rara vez ganarás la posición considerando la convocatoria masiva y proactiva (vía head-hunting) de estos procesos.
Esto implica que debes seguir un proceso intensivo de recopilación de información. También implica que estos esfuerzos te llevarán a aplicar a muy pocas posiciones. Por eso el nombre de francotirador: observas y esperas el momento preciso para con la menor cantidad de aplicaciones (municiones) lograr tu objetivo de conseguir trabajo.
El plan de acción del francotirador. Es crucial establecer sistemas que te mantengan informado de las oportunidades vigentes. En muchos casos, la internet te permite manejar esto con eficiencia. En otros es necesario un plan sistemático de contactos telefónicos o visitas. Algunas acciones sugeridas:
a) Envía tu CV y contáctate con las principales empresas de
executive search en el Perú. Las Páginas Amarillas o la guía de capital humano (
http://www.infocapitalhumano.pe/) proveen información completa de las empresas que operan en este rubro. Una vez establecido el contacto, fija un cronograma para recontactar a estas empresas y recordarles de tu existencia e intenciones.
b) En el pasado, las bolsas de universidades y maestrías se utilizaban únicamente para posiciones de niveles bajos y medios. Hoy no es así. Consigue acceso a las bolsas de trabajo de las principales maestrías y universidades del Perú (no te limites a aquellas de la maestría donde estudiaste). La mayoría de estas bolsas permiten suscribirse a un boletín diario que informa de posiciones nuevas.
c) Repite la operación anterior con las bolsas de trabajo de las principales empresas donde te interese trabajar. Para asegurarte de incluir a todas las empresas relevantes, asesórate de un listado confiable como el que emite el libro Las Top 10,000 principales empresas del Perú, las Páginas Amarillas, los reportes de Conasev, el ANDA (Asociación de Anunciantes del Perú), o cualquier listado que se relacione con el rubro de tu interés. Considera también las oportunidades listadas de Linkedin.com y otras redes sociales.
d) Revisa la información publicada en el diario El Comercio los días domingos.
2. Estrategia y plan de acción para procesos no estructurados: networking
La estrategia de Rambo. Estás en búsqueda de procesos de selección “ocultos”, que en muchos casos sólo existen en la cabeza del potencial jefe o que se generan durante una conversación (o inclusive a posteriori). Algunos ejemplos de las razones que generan esta clase de procesos son:
- Se evalúan nuevas líneas de negocio.
- Se dividen departamentos enteros en dos o tres subdepartamentos para una mejor administración.
- Se crea un nivel adicional en las escalas de jerarquía para la mejor administración de un negocio que creció aceleradamente.
- Se decide reubicar o remplazar a un ejecutivo que había tenido una performance cuestionable.
A diferencia de los procesos estructurados, en esta clase de contactos no se sigue un proceso formal con un número grande de candidatos. Se apuesta por el dinamismo y la rapidez. Típicamente sucede que un gerente general toma una decisión rápida y desea evitar los negativos de correr un proceso formal: carga laboral para RRHH, el costo de una empresa de executive search, meses sin resultados, el riesgo de que el personal de la empresa o los clientes se enteren y traten de influenciar en la decisión, etc.
En los procesos no estructurados, las posiciones se crean en una reunión entre el candidato y el contratante. La única manera efectiva de dar con estas oportunidades es a través de contacto personal: desarrollando tu red de contactos a través de entrevistas informativas.
Una entrevista informativa es una reunión de 15 minutos a la que acudes con el objetivo de lograr cuando menos dos entrevistas más con contactos de la persona que te recibe. Los primeros cinco minutos hablas de ti: qué has hecho y qué clase de posición buscas (idealmente muestras tu CV). En los siguientes 10 minutos te abocas a entender la experiencia de la persona anfitriona en la empresa en la que trabaja (para ver si esa empresa tiene una vacante como la que buscas) y tratar de generar cuando menos dos reuniones más con gente que el entrevistador conozca.
La clave para que esto funcione es ejecutarlas con profesionalismo, es decir, ser enfocado, sincero y puntual. Sólo así los entrevistadores se sentirán cómodos de referirte a su red de contactos. De esta manera vas de persona en persona hasta que des con alguien que se interese en tu perfil. En ese momento, el objetivo de la reunión cambia y se convierte en una entrevista de trabajo.
Mientras más entrevistas informativas generes, mayor oportunidad de que éstas se conviertan en entrevistas laborales. De ahí el nombre de la estrategia Rambo en contraste con la del francotirador. En este caso disparas a todo lo que se mueve. Tu gasto de munición es alto pero economizas todo el tiempo de espera para llegar en el tiempo exacto a hablar con la persona exacta.
El plan de acción de Rambo:
- Haz una lista de todas las personas que conozcas. Agrúpalas por el tipo de relación que tengas con ellas: universidad, colegio, trabajos anteriores, clubes, parientes, amigos de amigos, proveedores (como tu dentista, médico de cabecera), vecinos.
- Pide reuniones informativas con cada uno de los anteriores y cumple con generar cuando menos dos entrevistas adicionales por contactos.
Seguir este proceso de manera estructurada permite en muchos casos conseguir oportunidades laborales mejor remuneradas que en procesos estructurados, ya que la competencia es menor.
Armonización de estrategias y planes
En un primer momento, te recomendamos destinar el 100% de tu tiempo a los procesos estructurados. Esto porque esos procesos ya existen y son inmediatos. En menos de dos semanas de trabajo deberías haber sido capaz de registrar todas las fuentes de oportunidades y sistematizar tu interacción con estas fuentes para mantenerte actualizado. De ahí en adelante no será necesario que dediques más de 20 minutos al día a este tipo de procesos, revisando únicamente que no se hayan generado nuevas oportunidades. Es importantísimo respetar la regla de oro con este tipo de proceso: Sólo postula cuando veas que encajas cuando menos en un 90% con el perfil.
Una vez cubierta la primera fase con los procesos estructurados, puedes dedicar el resto del tiempo al networking vía entrevistas informativas.
Consejos adicionales
La necesidad de información: Es crucial que durante tu búsqueda de trabajo te mantengas alerta a la información de tu entorno. Desde lo más genérico a lo más específico: desde leer el periódico para enterarte qué pasa con la economía y la política del país hasta buscar información específica en internet y otras fuentes de las empresas a las que vas a postular y las personas que te van a entrevistar. Esto te informa de oportunidades coyunturales en empresas y te permite ser más atinado al solicitar entrevistas informativas o de trabajo.
Busca exhibir tu producto: En este caso tú eres el producto. Sal a comer a lugares concurridos, anda a reuniones, a presentaciones, etc. Muy frecuentemente en estos lugares se escucha de oportunidades laborales.
CV a la medida: No utilices siempre el mismo CV. Adapta tu CV para cada persona y puesto al que te presentes destacando tu experiencia relevante para ese puesto y empresa.
Positivismo: Cada interacción debe venir acompañada de un aura de positivismo. Muy pocas personas toleran al gruñón que los busca para hablar mal de su empleador actual o antiguo empleador. Es mucho más reconfortante reunirse con una persona a la que le va bien, pero que busca una mejora o que a pesar de estar desempleada mira el vaso medio lleno. El cerebro humano funciona por asociaciones. Si hablas de cosas negativas, consigues que asocien tu recuerdo con un sabor amargo.
Vanidad: La vanidad puede ser tu enemigo. Algunos tienden a mirar hacia abajo a sus entrevistadores filtro en procesos estructurados. Otros miran hacia abajo a contactos de networking que no resultan tener un nivel jerárquico alto en la organización donde trabajan. Estas acciones no terminan en nada productivo. En la mayoría de los casos separan a los candidatos de los procesos de selección o restringen el alcance de su networking. Sé humilde.
Cover letters o cartas de presentación: En otros países se estila acompañar una carta de presentación al CV. Esta explica tu motivación por el puesto, tu conocimiento de la empresa y tu objetivo de búsqueda. En el Perú, esto podría ser demasiado. Corres el riesgo de que simplemente no la lean. Recomendamos sintetizar la info de la carta de presentación en un párrafo de no más de tres líneas que incluyas en el e-mail en el que envías tu CV.
http://blogs.semanaeconomica.com/blogs/factor-humano/posts/como-conseguir-entrevistas-de-trabajo#ixzz1GioIvkkD